
La campaña electoral, aún la más atípica de todas, pone en carrera la zafra de vendedores de varios servicios. Partidos políticos y candidatos buscan diferentes formas de llegar a la población, y para ello deben recurrir a varios medios. Todos con un costo
determinado.
Uno de los servicios que aparece una vez más es el de empresas encuestadoras. Y para el ciudadano, los datos que se hacen público se transforman en un acto de fe: se les “cree” mucho o poco de acuerdo a cómo sus números favorezcan al candidato o
partido de su preferencia.
Es cada vez menos el número de personas que miran las encuentras como el fruto de un trabajo científico que refleja el comportamiento de la población en el momento que fue hecho el relevamiento.
Sin embargo en el mundo empresarial cada vez más se utiliza este recurso para la toma de decisiones. Y vinculados con las elecciones departamentales, pudimos conocer que varias
empresas y grupos inversores están recurriendo a consultoras para medir específicamente la intención de voto de los rochenses.
Dos desarrolladores inmobiliarios consultados para este artículo revelaron que no es ajeno para los varios inversores el signo político del futuro rochense. En particular, estos actores están vinculados a grupos interesados en la costa Sur de Rocha (área cercana a Laguna Garzón) donde se ha desarrollado en los últimos años un proceso de cambios sobre el uso del suelo. Y señalan que en sus definiciones al corto y mediano plazo incidirá qué pase con el futuro del gobierno departamental. Por esa razón les interesa conocer la tendencia electoral de la población rochense.
En tanto un Doctor en Ciencias Políticas, docente de la licenciatura, señaló que varias empresas encuestadoras reciben todo el tiempo demanda de clientes en este sentido. “Ocurre que ese interés no es parte de la agenda pública, ya que normalmente los resultados no son de dominio público”.
En consecuencia, mientras los partidos políticos manejan públicamente algunos datos en relación a las encuestas, normalmente en relación a si los números les son favorables; mucho más se sabe sobre la preferencia electoral de los rochenses en información que es de interés de empresas e inversores.-
En cuanto a los partidos políticos a diferencia de la campaña del año 2015, en que uno de los candidatos buscaba afanosamente mediante el uso intensivo de los spots llegar a sectores distantes de su partido político,en esta campaña, los candidatos casi no han
intentado abandonar a sus electores cautivos y los electores independientes que han conquistado mediante un discurso que por momentos aparece segmentado y con formas de posicionamiento bastante ideológicas, esto ha significado que los partidos se han dedicado,principalmente, a mantener sus nichos electorales arriesgando muy poco.
Esto nos coloca en una disyuntiva distinta que la elección del 2015 donde parecía haber modificado, el combate a partir de la propia trinchera, en la que los candidatos esperan el error del contrincante mientras hacen rounds de sombra y se mantienen cerca de sus bases.
Cuando los rochenses se reunieron entre familias y amigos para despedir el 2019, cientos de nosotros con optimismo confiamos en que el venidero año sería mucho mejor porque nuestro "rochita querido " avanzaba y los problemas que nos afectaban convivían desde hace años sin ser antagónicos como para entorpecer el desarrollo del departamento. De repente, todo se transformó en una crisis sanitaria internacional sin precedentes y un freno abrupto a cualquier proyecto y aspiración individual.
A casi cuatro meses para despedir el 2020 y en el vórtice de una recesión económica creada por el SARS-COVID-2, la opinión que pueda generar una u otra encuesta resulta casi irrelevante y para algunos temprana a pesar de que puedan moverse tendencias o criterios.
Por delante hay un camino impredecible hasta setiembre ,cuando cada ciudadano tendrá la oportunidad de escoger su opción mediante el sufragio en un sistema multicultural y democrático; es lo más importante y lo que a juicio pleno se debe preservar.