La indignación de un pasajero del ómnibus accidentado en Pocitos tras las pericias: "Lo vimos muy despierto"
Matías Muniz, uno de los pasajeros del ómnibus de ...
Matías Muniz, uno de los pasajeros del ómnibus de Cutcsa que se accidentó en la playa de Pocitos el 21 de octubre de 2024, se mostró "indignado" tras los resultados de las pericias que aseguran que el chofer del ómnibus se encontraba en estado de "fatiga y somnolencia" cuando ocurrió el accidente.
"Desde mi perspectiva, lo vi muy despierto. No sé qué analizó o qué vio Fiscalía", sostuvo el joven de 20 años en diálogo con Telemundo (Canal 12).
Los resultados de las pericias, informados en primera instancia por El País, revelaron que el conductor se encontraba en un estado de "fatiga y somnolencia" al momento del accidente. Aunque pudo realizar tareas básicas como cobrar boletos y detenerse para la subida y bajada de pasajeros, al final del trayecto no logró salir del estado de somnolencia para alcanzar una vigilia plena, lo que provocó el accidente.
"Con los testigos que he hablado, nadie lo vio dormirse en ningún momento. Todos lo vimos muy despierto", aseguró el joven.
Tras conocerse dicha información, Matías reveló que sintió "un poco de indignación", ya que, desde su perspectiva, vio otra cosa.
Según contó, ese día se subió al ómnibus para ir a trabajar, saludó al chofer y este no le respondió. "Después, durante todo el camino empezó a manejar con imprudencia, saliendo mal en las paradas y pasando algún semáforo", dijo.
Para Matías, las secuelas y el "trauma" del accidente se van a quedar con él de "por vida".
"Lo que más me afectó fueron las secuelas que te quedan. Sobre todo problemas para dormir y que cuando me subo a un bondi voy nervioso, comiéndome las uñas", cerró.
¿Qué indicaron en profundidad las pericias y a qué conclusiones llegaron los expertos?La pericia psiquiátrica reveló tres versiones contradictorias por parte del conductor. Inicialmente, mencionó fallas en los frenos del autobús. Días después afirmó no recordar el trayecto entre Ciudad Vieja y el lugar del accidente, y finalmente, dijo no tener memoria de los últimos minutos antes del impacto.
Según la pericia, que fue entregada el 17 de diciembre por el Departamento Criminológico del Instituto Técnico Forense, el hombre padece desde los 14 años el síndrome de Klinefelter, que afecta la movilidad, y su capacidad de discernimiento.
El hombre dio tres versiones: el 26/10 dijo que se quedó sin frenos, el 31 de octubre que su último recuerdo fue a las 6:10, saliendo desde la Terminal de Punta Carretas a Ciudad Vieja en el viaje previo al viaje del accidente y el 5 de noviembre le dijo a un psiquiatra que no recuerda nada desde unos minutos antes del choque.
Los peritos Gabriel Barreiro y Álvaro Trindade determinaron que el conductor estaba en un marcado estado de "fatiga y somnolencia". Aunque pudo realizar tareas básicas como cobrar boletos y detenerse para la subida y bajada de pasajeros, al final del trayecto no logró salir del estado de somnolencia para alcanzar una vigilia plena, lo que provocó el accidente.