Mujeres murguistas: cuántas hay sobre los escenarios del Carnaval 2025 y qué dicen los números
La fotografía de Juana “Pochola” Silva desfilando al frente de la murga es prácticamente inolvidable. Era el Carnaval de 1962. La cara pintada, un frac rojo y sombrero de copa, saludaba con l...
La fotografía de Juana “Pochola” Silva desfilando al frente de la murga es prácticamente inolvidable. Era el Carnaval de 1962. La cara pintada, un frac rojo y sombrero de copa, saludaba con la mano levantada a la gente que se amontonaba contra la vereda y veía pasar a la primera murga de mujeres: Rumbo al infierno.
Formada en 1958, la murga de mujeres avanzó por la avenida al encuentro de Dios Momo. Aunque su conformación había sido “sumamente difícil”. “No es porque no les atraiga la idea de salir en una murga; simplemente no se presentan por los prejuicios, por el qué dirán. Yo quisiera decirles a todas las chicas que quieren, como yo, al carnaval y tienen deseos de integrar una murga que lo hagan. Mi mayor satisfacción sería que saliera no una, sino muchas murgas femeninas de aquí en adelante”, dijo Silva en una entrevistas con la revista Mundo Uruguayo.
Murga_femenina__Rumbo_al_infierno__Directora_Juana__Pochola__Silva.jpgUna murga enteramente de mujeres sigue resultando subversiva 63 años después. A diferencia de categorías como Revistas o Sociedades de Negros y Lubolos, donde la participación femenina va de la mano del reglamento y la conformación de los cuerpos de baile de las agrupaciones (donde quizás la mirada deba estar puesta en los roles de definiciones) tanto las Murgas, como los Parodistas o los Humoristas, han sido históricamente reticentes a la participación de mujeres aunque, también históricamente, ellas se hayan revelado.
En El lado B de la murga: la mujer y su participación Victoria Gutiérrez, Pía Brava y Sabrina Umpiérrez hacen una investigación histórica de la participación femenina en la murga y registran la participación de la mujer a partir de la década del 30 vinculada a la figura de Perlita Cucú.
En la década de 1970 Las Ninfas de las Bóvedas salieron desde la Aduana. Y durante veinte años tomaron cuerpo en el Carnaval nombres como el de Mary da Cuña, Gabriela Gómez y Mónica Santos. Ya para la década de 1990 se conformaron cuatro murgas con las mujeres al frente: La Sicótica (1993), La Nueva Pincelada (1993), Miscelánea (1996/1997) y La Bolilla que Faltaba (1998).
En los inicios este milenio fue la murga Cero Bola la que se convirtió en un fenómeno murguero, después de ganar el Encuentro de Murga Joven y dar el paso al Concurso Oficial de Carnaval completamente conformada por mujeres. Y si bien actualmente ninguna murga de conformación femenina concursa en el Teatro de Verano, la evolución y la revolución de las mujeres murguistas viene abriendo espacios de participación tanto arriba como abajo del escenario.
“Todo parece indicar que, al amparo de Momo, las mujeres —unas y otras— se las ingeniaron para atemperar, en mayor o menor grado, los rigores del disciplinamiento. Y sobre todo, para seguir ostentando, desde la ‘barbarie’ o la ‘civilización’, su condición de protagonistas predilectas de la fiesta”, escribió la investigadora Milita Alfaro en Carnaval. Una historia social de Montevideo desde la perspectiva de la fiesta.
¿Qué dicen los números del Carnaval 2025?En el Carnaval que acaba de comenzar subirán 46 mujeres, de 375 murguistas que cantarán en el Templo de Momo. Este año, de las 22 murgas que participan del concurso, 20 tienen en su conformación al menos un componente femenino.
WhatsApp Image 2025-01-31 at 20.52.14.jpegMurga Cayó la Cabra en el Desfile Inaugural de Carnaval
Juan SamuelleLa cifra es similar a la de 2024 (47) y 2023 (44). En 2022, después de un carnaval suspendido como medida pandémica y especialmente la revolución de Varones Carnaval que expuso violencias y discriminaciones en la interna de la fiesta popular, subieron 38 mujeres a la categoría.
Sin embargo, la presencia de mujeres en los coros de murgas todavía parece ser singular. En nueve de las 22 murgas que participan hay una única mujer en el coro. Del otro lado del espectro está A la bartola, que compite este año como la murga con mayor presencia femenina con seis, seguida de Gente Grande (5), Cayó la cabra (4) y La Mojigata (4). No es casualidad que todas provengan del Encuentro de Murga Joven, un espacio que desde su conformación ha impulsado la participación paritaria en los conjuntos.
WhatsApp Image 2025-01-31 at 20.52.14 (1).jpegAbril Pereira con La Gran Muñeca en el Desfile Inaugural de Carnaval
Juan SamuelleLas dos murgas que todavía no han incorporado mujeres en sus elencos son dos títulos tradicionales en el Carnaval uruguayo: La Nueva Milonga y Araca la Cana.
El año pasado a esa dupla se le sumaba una tercera -conformada únicamente por hombres-, que este año decidió incorporar a una murguista por primera vez en su historia: La Trasnochada fichó a Lucía Fernández.
cdd4a53a-bca0-4c50-838a-60d6372bfdff.jpeg¿Pero qué pasa cuando hacemos énfasis en los lugares que asumen las mujeres (y los que no)? Este año una sola mujer está al frente de la dirección escénica de una murga, se trata de Carmela Viñas en A la Bartola, que el año pasado era acompañada el rubro por Romina Repetto en Mi vieja mula.
A la Bartola es la murga que más se acerca a un modelo paritario, con mujeres murguistas prácticamente en todos los rubros: dirección escénica, coro, batería, textos, arreglos corales y roles técnicos desde puestita hasta utilera.
WhatsApp Image 2025-01-31 at 20.52.15 (1).jpegOtro de los espacios que está lejos de la paridad es la instrumentación. La batería de murga sigue siendo una tríada principalmente masculina. Cuatro murgas tienen mujeres en la batería, Gente Grande es una excepción con Lucía Da Silva Faust y Estefanía Mannise Antúnez da Graça, Un título viejo mantiene el redoblante de Sofía Chapi Farías, A la Bartola tiene a Tamara Rosas y el bombo de Joaquina Aguiar suena en la murga debutante Sorda de un oído.
Más allá de la conformación de las componentes, si se toma en cuenta quiénes escriben los textos de las murgas de 2025 con más de seis decenas de personas son ocho las mujeres que escriben lo que la murga canta y sólo en Un título viejo son dos las mujeres que aportan en los textos.
WhatsApp Image 2025-02-01 at 02.09.52.jpegEn las dos murgas en las que todavía los que suben a cantar son únicamente los hombres, son mujeres las que escriben lo que se canta. En La nueva Milonga, al igual que en su regreso al Carnaval en 2023 cuenta con Jimena Márquez en los textos mientras que Patricia Silva, la directora responsable de Araca la Cana, es parte del equipo creativo de la murga.