Grupo Larrarte: ingeniero a cargo del SNIG contó en fiscalía como saltaron las alarmas y se descubrió la "alteración en la calidad de los datos"

"Todos los productores tienen clave de acceso al sistema (SNIG) y puedan entrar a ver sus datos. (En el caso del...

"Todos los productores tienen clave de acceso al sistema (SNIG) y puedan entrar a ver sus datos. (En el caso del Grupo Larrarte cuando los inversores pedían la clave para entrar) ya estaba otorgada al grupo". Así fue como explicó el encargado del Sistema Nacional de Información Ganadera, Gabriel Osorio que se les "prendieron varias luces" cuando numeroso inversores de esa empresa llegaron a la oficina del Ministerio de Ganadería para pedir acceder al sistema.

Al declarar este lunes 17 ante los fiscales adjuntos de la Fiscalía de Delitos Económicos de 1er Turno Leonardo Rosas y Franco López el ingenerio agrónomo explicó cómo funciona el registro y cuáles fueron las irregularidades que encontraron al hacer una inspección en los campos donde la empresa tenía el ganado en setiembre de 2024.

El jerarca, que ocupa el cargo desde abril de 2020 pero es un funcionario de carrera del MGAP desde 1996, contó que nunca había visto una situación como la que surgió con el Grupo Larrarte que luego "se multiplicó por tres" en alusión a los casos de República Ganadera y Conexión Gandera.

"Cuando vienen a consultar uno, dos, tres, nunca nos había pasado... dijimos acá hay una alteración en la calidad de los datos". "Cuando revisaban tenían o menos animales de los que pensaban tener o tenían cero", declaró.

Eso los llevó a revisar a nombre de quién estaba ese ganado y surgía que vinculaba con un mail que se llamaba "trazablidad Larrarte, algo así, y era el mismo mail en la mayoría de los casos".

0001614992.webp Gabriel Osorio, director de DicoseN. Garrido

También descubrieron que la mayoría de los inversores no conocía al SNIG, que la empresa levantaba documentos en blanco, se los hacía firmar a las empresa y los traían al MGAP. "La gente ingresaba como productor, nosotros no nos enterábamos, para nosotros era un productor más que estaba a pastoreo en un campo ajeno", indicó.

Esa situación llevó al propio Osorio, según declaró en Fiscalía, a proponerle al ministro de ese momento, Fernando Mattos, a realizar una inspección de oficio en los campos donde hubiera ganado a nombre de Larrarte ante las "denuncias de maniobras de apariencia delictiva (...) que prendieron varias luces".

Contó que el trabajo se hizo en dos semanas ya que era una cantidad manejable de ganado. Para ello se decretó la "interdicción sanitaria", para asegurarse de que no se moviera a los animales.

Esos campos estaban básicamente en Rivera y Tacuarembó en las localidades de La Calera, Manuel Díaz, Minas de corrales, Luján, Mateo Fernandez, Zanja de la arena, Paso Monteiro, y Cardozo Grande.

Cómo funciona el SNIG: guía, caravana, marca

Osorio explicó que la guía es como una declaración jurada, a través de la cual el futuro productor registra en el SNIG que tiene ganado y puede tenerlo sin campo o con campo.

La guía es obligatoria, va firmada y tiene que cumplir con ciertos requisitos, que se complentan en cuatro campos de informacion (A, B, C y D) en los que se informa quién es el titular del ganado, dónde está ubicado ese ganado, el detalle del campo dónde está y el detalle de los animales.

También señaló que el productor, por ley, tiene que contramarcar a los vacunos, por lo que tras recibir los documentos, elige el dibujo con el que los va a marcar, va a un herrero y le hace la marca que luego tiene una duración de diez años. Agregó que "hay una brecha" porque el Código Rural no establece un plazo para hacerlo y a veces pasa que "cuando va a vender el ganado no lo contramarcó y ahí tiene que hacerlo".

0017787634.webp El sistema del SNIG servirá también para controlar el uso de antibióticos en producción animalJ. Samuelle

A su vez, la caravana es un registro en el sistema pero "la marca prima sobre la caravana", desde el punto de vista legal, aseguró.

Por su parte, la guía de propiedad y tránsito (GPT) -que se compra en las intendencias- es lo que documenta la transacción, y se hace en forma electrónica pero también en papel. Esa guía en papel se debe presentar cada vez que el ganado será movido, por venta o consignación, en la comisaría o seccional para autorizar el movimiento. También hay que llevarla a la comisaría del lugar de destino del ganado, indicó el agrónomo.

"Si se hace solo la guía electrónica y no la de papel hay una falta ahí que hay que investigar", dijo Osorio y explicó que eso fue lo que descubrieron en el caso del Grupo Larrarte, donde vieron dos situaciones, que la guía electrónica se realizó "desacompasada" con la de papel y en otros casos directamente no existía la guía papel y si existía la guía electrónica.

Ante la pregunta de ¿quién debería haber hecho esa guía?, Osorio que respondió que lo debió hacer "el titular de los animales".

Admitió que es habitual que "demore un poco en llegar la guía en papel pero no puede demorar más de 20 días o un mes".