Maldonado y Rocha activaron el operativo “Verano Azul”, el mayor despliegue de seguridad del Este para la temporada 2025–2026. Con la presencia del ministro del Interior y principales autoridades, se anunciaron dos anillos de vigilancia —metropolitano y fronterizo— con pórticos, cámaras y lectores LPR. El Jefe de Policía de Rocha, Claudio Pereyra, afirmó que “el inicio del verano renueva esperanzas” y que la misión será brindar la seguridad necesaria para que visitantes y locales disfruten playas, eventos y espectáculos a lo largo de toda la costa. El objetivo: un verano protegido en el Este.

El Este uruguayo se prepara para una temporada que promete récord de visitantes y, en igual medida, desafíos de seguridad. Con ese telón de fondo, Maldonado y Rocha lanzaron el operativo “Verano Azul”, un dispositivo conjunto que busca blindar la franja costera desde diciembre hasta marzo, y que se presenta como una de las estrategias policiales más ambiciosas de los últimos años.

El acto de lanzamiento reunió a las principales autoridades de seguridad del país. El ministro del Interior, Carlos Negro; los intendentes Miguel Abella y Alejo Umpiérrez; el director de la Policía Nacional, José Azambuya; y los jefes de Policía Víctor Trezza (Maldonado) y Claudio Pereyra (Rocha), marcaron presencia en un gesto político que va más allá de la formalidad: una señal de que la temporada exige músculo institucional y coordinación real entre departamentos.

Negro subrayó que el Estado desplegará un volumen “muy importante de efectivos para abastecer los requerimientos de toda la costa”, recordando que la movilidad turística del verano convierte al país en un territorio fluido: un Uruguay que “se despliega desde Colonia hasta Tacuarembó”. El mensaje fue claro: la seguridad estival no es un episodio aislado, sino un ejercicio de administración territorial a gran escala.

El ministro también confirmó la implementación de dos anillos de vigilancia —uno metropolitano y otro fronterizo—, equipados con pórticos, cámaras móviles y lectores LPR capaces de integrarse con sistemas de alerta y análisis automatizado. Un salto tecnológico que, en la frontera Este, tendrá un peso especial, dada la circulación permanente entre Uruguay y Brasil.

El jefe de Policía de Maldonado, Víctor Trezza, colocó énfasis en una visión más amplia de la seguridad: no sólo prevenir y reprimir, sino garantizar “tranquilidad” durante eventos masivos que marcarán el verano. Es un mensaje que dialoga directamente con la estrategia de Rocha, donde los flujos turísticos se multiplican en cuestión de días.

En ese sentido, Claudio Pereyra —jefe de Policía de Rocha— fue directo: el inicio del verano “renueva esperanzas” y la misión es asegurar que los visitantes “disfruten de las playas y los espectáculos” con la confianza de un territorio protegido. En Rocha, donde los balnearios se expanden y la frontera condiciona la operativa diaria, el despliegue policial adquiere una relevancia particular.

La puesta en marcha de “Verano Azul” culminó con una salida simbólica de móviles y personal de todas las unidades: Guardia Republicana, Bomberos, Caminera, Prefectura, Educación Policial y los equipos de tránsito de Maldonado. La postal marcó el inicio oficial de un operativo que, más que un ritual de temporada, se instala como un recordatorio: la seguridad del verano no se improvisa.

Rocha, con su mezcla de costa abierta y frontera viva, será una pieza clave de esta estrategia. Y este año, más que nunca, tendrá los ojos del país puestos sobre su capacidad de respuesta.