DINARA avanza en la protección del recurso camarón antes del inicio de la próxima zafra. En los últimos días técnicos del organismo realizaron una campaña de monitoreo en la Laguna de Castillos y el arroyo Valizas, evaluando la presencia de peces juveniles y crustáceos.
Los resultados confirmaron la existencia de camarón y estimaciones preliminares que anticipan una zafra similar a la de años anteriores. La fecha de apertura será definida tras nuevas evaluaciones previstas para fines de enero y comienzos de febrero.
El monitoreo científico previo vuelve a posicionarse como una herramienta clave para garantizar una pesca sostenible y responsable en el este del país.

En silencio, lejos del ruido político y del apuro comercial, el Estado volvió a mirar el agua antes de autorizar la pesca. Entre el 18 y el 19 de diciembre, técnicos de la Dirección Nacional de Recursos Acuáticos (DINARA), dependiente del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, realizaron una campaña de evaluación y monitoreo en la Laguna de Castillos y el arroyo Valizas, dos ecosistemas clave del este uruguayo.

No se trató de un trámite. Fue una decisión técnica con impacto social, ambiental y económico.

Los relevamientos confirmaron la presencia de camarón y permitieron realizar estimaciones preliminares de abundancia. Los primeros resultados indican que la zafra 2026 podría desarrollarse en niveles similares a los de años anteriores, aunque la fecha de inicio aún no está definida. La habilitación dependerá de nuevas evaluaciones previstas para fines de enero y comienzos de febrero.

Ese detalle no es menor. En un país donde la pesca artesanal sostiene economías locales y saberes transmitidos por generaciones, la diferencia entre una buena zafra y un colapso del recurso está en el monitoreo previo. En medir antes de extraer. En conocer antes de autorizar.

La campaña incluyó la evaluación de peces juveniles y crustáceos, una etapa crítica para asegurar la sostenibilidad del ecosistema. DINARA insiste en un principio que hoy guía a las principales agencias pesqueras del mundo: sin información científica, no hay pesca responsable.

La Laguna de Castillos y el sistema Valizas no solo concentran biodiversidad. También concentran expectativas. Familias enteras dependen de decisiones que, aunque técnicas, definen el pulso del verano y la estabilidad del año.

Este trabajo de campo, poco visible pero determinante, confirma que la protección del recurso no es un eslogan. Es una política pública que se construye con botas en el barro, redes de muestreo y datos precisos.

Cuando llegue la zafra —si llega— no será fruto del azar. Será el resultado de haber mirado el agua antes de lanzar la red.