Organizaciones feministas de Rocha solicitaron a la Intendencia que retire al músico Gustavo Cordera de la grilla del festival Semana de Rocha 2025, que comienza hoy. El pedido fue presentado en la Junta Departamental por el edil frenteamplista Alejandro Vaselli, quien dio lectura a una carta firmada por el Colectivo 8M de La Paloma y más de 200 personas.

Las agrupaciones afirman que la presencia de Cordera, recordado por sus declaraciones misóginas, “contradice los valores de respeto e igualdad” que deben guiar los eventos públicos.

Colectivos y organizaciones sociales piden a la Intendencia excluir al músico de la grilla de la Semana de Rocha por sus “expresiones misóginas y legitimadoras de la violencia”. El edil frenteamplista Alejandro Vaselli dio lectura a la carta en la Junta Departamental.

La presencia de Gustavo “Pelado” Cordera en el festival Semana de Rocha 2025, que comienza este miércoles, generó una fuerte polémica en el departamento. Diversas organizaciones feministas y estudiantiles reclamaron que el músico argentino sea retirado de la programación, argumentando que sus declaraciones recientes —y su historial público de comentarios misóginos— resultan incompatibles con los valores de respeto y no violencia que debe sostener una actividad cultural organizada por el Estado.

El planteo fue leído en la Junta Departamental por el edil frenteamplista Alejandro Vaselli, quien dio voz a una carta enviada por el Colectivo 8M de La Paloma, respaldada por más de 200 firmas y varias agrupaciones sociales y políticas. El documento fue dirigido al intendente Alejo Umpiérrez, al secretario general Valentín Martínez, al director de Cultura Fernando Abreu y a la directora de Género Blanca Repeto.

“Permitir la presentación de un artista que ha expresado públicamente estas ideas implica un retroceso simbólico en el compromiso con la igualdad y los derechos humanos”, sostiene la carta, que reclama la exclusión del músico de la programación oficial.
“Solicitamos que se retire la actuación del señor Gustavo Cordera de la Semana de Rocha, en favor de una cultura libre de violencias”.

Un reclamo con perspectiva política y social

El pedido se produce pocos días antes de que Cordera, exlíder de Bersuit Vergarabat, suba al escenario principal el sábado 8 de noviembre, en el marco de los festejos de la tradicional Semana de Rocha. La misiva, respaldada por colectivos de Chuy, el Círculo Feminista de Casa Grande, la Comisión de Género del Frente Amplio y el Centro de Estudiantes de Formación en Educación de Rocha (CEFER), fue enviada también al Ejecutivo Departamental.

El reclamo se enmarca en un contexto regional de alto impacto social, tras nuevas expresiones del artista en septiembre pasado. En la serie documental “Ricardo Barreda, el odontólogo femicida”, Cordera aparece interpretando una estrofa de su canción “La argentinidad al palo” que dice: “Locatti, Barreda, Monzón y Cordera también matan por amor”.

La frase fue duramente criticada en redes sociales y por colectivos feministas de ambos lados del Río de la Plata, por entender que romantiza el femicidio y minimiza la responsabilidad del agresor.

“Al afirmar que Barreda mató por amor o revestir el crimen de cierto romanticismo, se desplaza el foco del machismo estructural hacia una supuesta pasión o error”, advierte el texto leído por Vaselli. “Ese discurso contribuye a normalizar la violencia de género”.

El pasado que vuelve

Cordera ya había sido objeto de repudio en 2016, cuando durante una charla con estudiantes de periodismo declaró: “Hay mujeres que necesitan, porque son histéricas, para tener sexo ser violadas”.
Aquella frase provocó una ola de indignación que derivó en su suspensión de varias plataformas y en la ruptura de contratos artísticos. Lejos de retractarse, el músico ha reiterado en entrevistas recientes que fue “víctima de la cultura de la cancelación”.

Sin embargo, las organizaciones feministas que hoy se pronuncian en Rocha consideran que la reiteración de sus discursos lo inhabilita moralmente para participar en eventos de carácter público. “Su presencia —afirman— representa una contradicción con las políticas culturales que el Estado departamental debe promover”.

Un debate que trasciende el escenario

El caso vuelve a poner sobre la mesa el papel de los gobiernos locales en la programación cultural y la responsabilidad institucional frente a artistas o figuras con antecedentes de discursos violentos.
“Las políticas culturales deben promover el respeto, la conciencia crítica y la erradicación de toda forma de violencia”, subraya la carta dirigida a la Intendencia.

Hasta el cierre de esta edición, la organización del festival no había emitido un pronunciamiento oficial respecto al pedido. Mientras tanto, en las redes sociales del departamento crece el debate sobre los límites entre la libertad artística y la responsabilidad ética en los espacios públicos.