La Dirección Nacional de Recursos Acuáticos (DINARA), dependiente del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, recuerda que se mantiene vigente la  resolución que establece una veda precautoria para la pesca de la corvina negra (Pogonias courbina) en aguas nacionales. Dicha  medida se mantendrá vigente hasta el 15 de enero de 2026, y busca asegurar la continuidad biológica de una especie catalogada como vulnerable por su lento ritmo de reproducción.n La normativa prohíbe de forma absoluta la extracción bajo cualquier modalidad de pesca —artesanal, deportiva o industrial— en todos los ríos, arroyos y cuerpos de agua que desembocan en el Río de la Plata y el Océano Atlántico, incluyendo las zonas de salida de las lagunas costeras.

La corvina negra presenta características biológicas que incrementan su fragilidad ante la presión extractiva: crecimiento lento, baja fecundidad y mortalidad natural reducida, lo que conlleva un riesgo elevado de disminución poblacional. A ello se suma que, entre octubre y diciembre, la especie forma cardúmenes reproductivos en áreas específicas, volviéndose especialmente vulnerable a su captura durante ese proceso.

Las autoridades recordaron que las infracciones a la veda serán sancionadas según lo establece la Ley Nº 19.175, así como otras disposiciones reglamentarias vigentes en el país.

Desde DINARA se enfatizó que la resolución se enmarca en un enfoque precautorio de gestión pesquera, alineado con los principios de pesca responsable de la FAO, subrayando que Uruguay mantiene el compromiso de preservar los recursos acuáticos con criterios científicos, sostenibles y de largo plazo.

La decisión coloca nuevamente en el centro del debate la necesidad de equilibrar el desarrollo económico, el trabajo de las comunidades pesqueras y la protección ecosistémica, un desafío clave para los próximos años en el país.