Escuchar artículo

ADEOM Rocha convocó a una asamblea general para el jueves 6 de noviembre a las 10 de la mañana en su sede central.
El único punto en el orden del día será la negociación colectiva con el Ejecutivo Departamental, tras recibir la contrapropuesta final del intendente Alejo Umpiérrez. El dirigente sindical Nelson Alonso confirmó a Rochaaldia.com que serán los propios trabajadores quienes decidirán si aceptan la oferta del Ejecutivo o si el sindicato continúa negociando.
Desde el Ejecutivo informan a Rochaaldía.com que la  propuesta incluye ajuste del 100% del IPC, adelantos cuatrimestrales y un premio retiro de 24 sueldos para funcionarios con más de 30 años de servicio.

 

El pulso entre el Ejecutivo Departamental y la Asociación de Empleados y Obreros Municipales de Rocha (ADEOM) entra en una fase decisiva. El próximo jueves 6 de noviembre, a las 10:00 horas, los trabajadores municipales se reunirán en asamblea general en la sede del sindicato para definir el rumbo de una negociación colectiva que lleva semanas de tensión y discursos cruzados.

El único punto del día será la negociación salarial. Y, según adelantó a Rochaaldia.com el dirigente sindical Nelson Alonso, serán los propios trabajadores quienes decidirán si validan la última propuesta del Ejecutivo —encabezado por el intendente Alejo Umpiérrez— o si facultan a la directiva a continuar negociando en busca de mejores condiciones.

“Luego de recibir una contrapropuesta del Ejecutivo Departamental, esta información la vamos a trasladar a las asambleas de base en todo el departamento”, explicó Alonso. “La idea es que cada trabajador conozca con detalle cuál es la oferta del Ejecutivo, cuánto dinero se propone y en qué condiciones. Después de ese proceso informativo, convocamos a una asamblea general para el 6 de noviembre, donde se votará si se acepta la propuesta o si se faculta a la directiva para seguir negociando”.

Según Alonso, el diálogo con el Ejecutivo permitió avanzar en varios puntos de la plataforma, aunque el aspecto salarial sigue siendo el más sensible.

“Hemos llegado a un preacuerdo en muchos temas, pero todavía no se firmó nada. Teníamos un mandato anterior de asamblea que fijaba un piso de negociación, y la nueva propuesta no colma del todo las expectativas de los trabajadores ni de la directiva”, indicó.

El dirigente subrayó que la contrapropuesta del Ejecutivo fue presentada como la “última oferta”, un gesto que, lejos de cerrar la discusión, reforzó la necesidad de una definición colectiva.

“Nos dijeron que era la última oferta, pero serán los compañeros —a nivel departamental— quienes decidan. Ellos resolverán si se acepta lo que plantea el Ejecutivo o si seguimos trabajando para mejorar esa propuesta. La decisión será democrática y transparente”.

Para Alonso, el valor de este proceso no se mide solo en términos de pesos y porcentajes, sino en la legitimidad que otorga la participación de base.

“Queremos que todos los trabajadores estén informados y que sean ellos quienes decidan. Esta discusión no es técnica, es política y social: tiene que ver con el valor que se le da al trabajo municipal en Rocha”, concluyó.

 

La propuesta sobre la mesa

Según la información remitida por el Ejecutivo Departamental a Rochaaldia.com, la oferta incluye un ajuste anual del 100% del IPC y un sistema de adelantos cuatrimestrales a partir de 2026. Además, se plantea un incremento real progresivo para los salarios más bajos —entre los grados 2 y 5— mediante partidas extraordinarias no salarizadas en 2028, 2029 y 2030.

En materia de seguridad social, la propuesta incluye un premio retiro de 24 sueldos para funcionarios con 30 años de servicio y 60 años de edad, una medida que busca descomprimir la plantilla y dar salida ordenada a los trabajadores próximos a jubilarse.

Desde la Intendencia, el intendente Alejo Umpiérrez defendió la propuesta con números sobre la mesa:

“El salario promedio municipal ronda los 73 mil pesos, hay casi 200 funcionarios que cobran entre 100 y 180 mil, y más de mil por encima de los 60 mil. Hemos aceptado 21 de los 25 puntos de la plataforma de ADEOM. Lo que no es viable es un aumento salarial indefinido: eso costaría seis millones de dólares. Y esos fondos podrían destinarse a obras y empleo”.

Sin embargo, el conflicto trasciende lo contable. Lo que se discute, en el fondo, es la continuidad de un modelo de recuperación salarial que desde 2005 permitió acompañar el costo de vida sin retrocesos en el poder adquisitivo.

El punto de quiebre

Hasta ahora, el convenio vigente garantizaba el ajuste por IPC en enero de cada año y una revisión correctiva si la inflación superaba el 10% a junio. Además, incorporó una partida anual de seis millones de pesos, equivalente a un aumento de 365 pesos mensuales por funcionario, que representó un 5,68% acumulado en cuatro años.

Ese 5,68% es hoy el punto de quiebre.
La dirigencia de ADEOM advierte que la nueva propuesta no contempla esa recuperación, lo que implicaría una pérdida efectiva de salario real.

“Desde 2005 en adelante siempre se logró mantener el IPC más recuperación. En algunos períodos hubo hasta un 2% anual adicional. Nuestra intención no es otra que conservar ese equilibrio. Lo mínimo que pedimos es no retroceder”, afirmó Alonso.

Un debate con ecos nacionales

Las declaraciones del intendente Umpiérrez, quien en tono encendido calificó al gremio de “glotones” y “mentirosos”, encendieron aún más la discusión. “No se puede mentir a los obreros, no se le puede mentir a los funcionarios municipales”, dijo el jefe departamental, marcando distancia con el sindicato y defendiendo la posición de su gobierno.

Desde el movimiento sindical, Jóselo López, secretario general de COFE e integrante del Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT, advirtió que la negociación colectiva no es una concesión política, sino un derecho consagrado por ley y por convenios internacionales.

“La Ley 18.508 establece claramente el derecho a la negociación colectiva en el sector público. Es una conquista que debe respetarse, más allá de las autonomías departamentales. En un país donde los precios suben y los salarios no acompañan, mantener el poder adquisitivo es una cuestión de justicia básica”, señaló López.

Más que un salario, una señal social

En Rocha, donde más de mil familias dependen directamente del salario municipal, el desenlace de esta negociación marcará un precedente.
Para muchos, no se trata solo de un convenio salarial, sino de una definición sobre el valor del trabajo público y la dignidad del empleo.

“Defender el convenio no es un tema sindical, es una cuestión social”, resumió Alonso.

El jueves 6, la asamblea de ADEOM decidirá si el capítulo se cierra con la propuesta del Ejecutivo o si se abre una nueva etapa de conflicto.
Sea cual sea el resultado, lo cierto es que Rocha se apresta a vivir una jornada clave para el sindicalismo municipal y para la historia reciente de su negociación colectiva.

 

Autor: ROCHAALDIA.COM