Con la proximidad de la discusión del presupuesto departamental, la Asociación de Empleados y Obreros Municipales de Rocha (ADEOM) puso sobre la mesa una ambiciosa plataforma reivindicativa que busca proyectar el futuro del trabajo municipal durante el próximo quinquenio. El documento, elaborado tras un extenso proceso de análisis y debate interno, plantea un conjunto de ejes que van desde el salario y la carrera funcional hasta la salud laboral y los asuntos sociales, con un objetivo claro: garantizar derechos, estabilidad y justicia para quienes sostienen diariamente el funcionamiento de la comuna.

La propuesta, lejos de presentarse como un pliego de reclamos aislados, se construye sobre una premisa política y social: que los ajustes presupuestales no pueden significar pérdida de beneficios ni recortes de puestos de trabajo. “Lo que planteamos son soluciones viables que armonicen las finanzas locales con las necesidades de los trabajadores”, sostienen desde la conducción sindical.

Salarios dignos y justicia social

Entre los puntos más fuertes se encuentra la recuperación salarial. ADEOM reclama ajustes anuales en enero y, a partir de 2026, la indexación total al IPC. Además, propone que el salario mínimo municipal no esté por debajo del equivalente a dos salarios mínimos nacionales al cierre del quinquenio. También se reivindican compensaciones para tareas insalubres, nocturnas y de alto riesgo, el pago de presentismo y la actualización de primas por antigüedad.

El sindicato también insiste en mantener los incentivos jubilatorios, planteando que la salida de trabajadores con causal de retiro debe acompañarse de estímulos que reconozcan la trayectoria.

Carrera funcional y capacitación

ADEOM subraya la necesidad de concursos transparentes, ascensos periódicos y la creación de cargos presupuestales que permitan absorber vacantes. La propuesta incluye la creación de una Escuela de Capacitación municipal, con formación en horario laboral y certificación para mejorar las posibilidades de ascenso.

La mirada de futuro también se extiende a los funcionarios más jóvenes: el gremio propone un convenio educativo que permita culminar estudios secundarios, garantizando que el derecho a la formación no quede relegado.

Salud, seguridad y derechos laborales

En un contexto en el que la precariedad y el desgaste atraviesan a muchos trabajadores, la plataforma sindical refuerza las demandas en materia de salud. ADEOM exige que la integración al FONASA no signifique pérdida salarial, participación activa en la negociación con Comero y garantías en salud ocupacional.

El gremio impulsa además la creación de una comisión bipartita para abordar casos de acoso laboral, violencia y discriminación, y propone políticas activas en salud mental, con apoyo psicológico y programas de prevención del estrés y las adicciones.

En el plano de la seguridad, se insiste en la entrega periódica de indumentaria, protección solar y mejores condiciones de infraestructura y equipamiento.

Contratados y asuntos sociales

ADEOM busca que los contratados con más de tres años de vínculo pasen a planta permanente, y que los de menor antigüedad sean evaluados con criterios claros y notificados de sus resultados.

En el plano social, el sindicato plantea beneficios para trabajadores activos y jubilados: descuentos en contribución inmobiliaria, patentes y servicios municipales, además de la asistencia en momentos críticos, como la disponibilidad de nichos en cementerios.

Cláusulas de negociación y diálogo

La plataforma concluye con una apuesta a la negociación colectiva como herramienta central. Ante cualquier conflicto, ADEOM propone agotar las instancias de diálogo bipartito y tripartito antes de adoptar medidas gremiales. También exige que no se modifique el estatuto del funcionario municipal sin previa negociación.

Una hoja de ruta para el quinquenio

La consigna que acompaña el documento —“Solidaridad y lucha”— sintetiza el espíritu de la plataforma: un programa de reivindicaciones que busca conjugar justicia social con responsabilidad institucional. La discusión del presupuesto departamental será el escenario donde se ponga a prueba hasta dónde el Ejecutivo municipal está dispuesto a escuchar a quienes garantizan, día a día, que el engranaje de los servicios públicos siga en movimiento.